Las ráfagas de aire y el cielo despejado del estadio Universitario de Caracas fueron testigos del tercer encuentro de la Gran Final de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional Venezolano, entre Leones del Caracas y Tiburones de La Guaira, en la que se entregó la primera Copa Bancamiga.
Las ráfagas de aire y el cielo despejado del estadio Universitario de Caracas fueron testigos del tercer encuentro de la Gran Final de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional Venezolano, entre Leones del Caracas y Tiburones de La Guaira, en la que se entregó la primera Copa Bancamiga.
Desde las 4:00 de la tarde el “stand” tipo igloo de Bancamiga acogió a varias personas que, con rostro curioso y mucho interés, consultaron sus dudas sobre nuestros productos y servicios financieros.
Una hora más tarde, los expectantes fanáticos ingresaron por las puertas del estadio y cada uno se ubicó en su puesto para disfrutar de un juego cargado de mucho ritmo, samba y diversión, propio de los aficionados al béisbol venezolano.
Con velocidad y mucho entusiasmo el equipo de Bancamiga bajó al terreno de juego y desplegó sus banderines a lo largo del campo, antes de que se interpretaran las notas del Himno Nacional.
Una noche de muchas sorpresas
Durante el partido varios fueron los momentos estelares para el banco, que pudo proyectar con fuerza su marca. Al llegar a la mitad del cuarto inning y final del séptimo, el animador anunció el ingreso de Bancamiga al campo de juego. Mientras, el público animado bailaba y pedía más música, un grupo de colaboradores corrió hacia la primera y tercera base lanzando a las tribunas franelas, gorras y pelotas canjeables por premios. Los eufóricos fanáticos se movían de izquierda a derecha para lograr atajar los obsequios.
La noche prometía aún más sorpresas. Y es que asombrados quedaron los asistentes cuando algunas parejas aparecieron en pantalla gigante durante la dinámica del Kiss Cam. Al son de canciones románticas se regalaron un beso.
La tensión se hizo aún más palpable al final de octavo inning cuando la barra de los Tiburones de la Guaira coreaba “Somos guairistas” y “Ya ganamos”. El último out del noveno dio la victoria a los salados.
En medio de un Universitario iluminado por linternas de celulares y la euforia de miles de fanáticos que vitoreaban al ritmo de la samba “Viva la Guaira”, el Presidente Ejecutivo de Bancamiga, Ariel José Martínez, entregó la primera Copa Bancamiga.
La imponente obra de 54 centímetros que simula una antorcha olímpica y refleja la solidez y el carácter innovador de Bancamiga, fue a manos del mánager de los Tiburones de La Guaira, Henry Blanco, quien la alzó y celebró el primer triunfo de su equipo.
